Dios no ocupará un corazón dividido

Dios no ocupará un corazón dividido ni reinará en un trono dividido... Llevad el yugo con Cristo y caminad diariamente con Dios. ¿Cómo lo haremos? Aferrándonos de la ayuda que ha provisto Dios. El Señor ha dicho: "Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá" (Mat. 7: 7) (Manuscrito 60, 1894).

Dios nos ha comprado, y demanda un trono en cada corazón. Nuestra mente y nuestro cuerpo deben subordinársele, y los hábitos naturales y apetitos deben ser sometidos a las necesidades más elevadas del alma. Pero en esta obra no podemos depender de nosotros mismos. No podemos estar seguros si seguimos nuestra propia dirección. El Espíritu Santo debe renovarnos y santificarnos. En el servicio de Dios no debe haber una obra hecha a medias.

1256499899739_f